lunes, 6 de diciembre de 2010

Otra vez el dinero se interpone

Cumbre sobre Cambio climático, en México
Ojalá que el propósito de la XVI cumbre de la ONU sobre cambio climático cubra las espectativas que muchos hombres y mujeres del mundo esperan de este encuentro.
Quizás las soluciones no sean concluyentes, pero al menos, si despertar la conciencia de quienes tienen que ver con el cuidado y protección del medio, resulta de la reunión; tendríamos gran camino transitado.

!EL DINERO! !SIEMPRE EL DINERO! Esa es la traba mayor que hoy enfrentan las organizaciones enfrascadas en disminuir el maltrato que contra la madre natura se dispersa por el mundo. Desde que el hombre comenzó a vivir en sociedad, y desde que el intercambio medió por el dinero, esa ha sido siempre la mayor disyuntiva en todos los campos y esferas de la vida. !Total, de qué les servirá tanta fortuna si no salvamos la Casa Grande?

De acuerdo con las estimaciones realizadas por la Secretaría de la Convención Marco y el Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, los montos prometidos bajo el pacto de Copenhague son insuficientes frente a las necesidades identificadas en los países en desarrollo en cuanto a la adaptación y la mitigación del cambio climático.

¿Será esto posible? Si solo un poco, un poco de cada uno de los pocos que tienen mucho, sería sufuciente. Parece que todavía olvidan que ni la destrucción, ni el hambre, ni el deterioro ambiental, seleccionan los rostros o familias que las van a ppadecer. Pero bueno, ojalá no sea tarde cuando decidan ofrecer todo el apoyo que se necesite.

Con una buena preparación del terreno para el segmento de alto nivel de la próxima semana, con la presencia de jefes de Estado o Gobierno y ministros de varias carteras; quizás este encuentro, tan esperado, y pedido por millones de personas, dé algún fruto final.
No es pesimismo, sino detenimiento en comprobar el poco interés que hay en concretar esfuerzos.
Solo el tiempo lo dirá, pero nosotros, los que aún permanecemos empeñándonos, no dejaremos un instante la denuncia y el pedido para quienes no han abierto los ojos y se encaprican en seguir dormidos.

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